Viendo pintar II

Ya es granada, en la cama, con ese gustirrinin que te invade desde las piernas a los pulmones, por cansancio quizás, siempre se ha dicho que el turismo cansa mucho, o por la sensación del buen trabajo realizado, y aunque Cordoba no ha sido un trabajo, hemos podido ver y hacer todo lo planeado, incluso conseguir que el hermano de Jose Maria creyese, aunque solo haya sido durante un segundo, que el enorme, duro, y muy crujiente maravilloso flamenquin cordobés, era PENE DE TORO frito, su cara al ver aquello aterrizar en la mesa.... no tiene precio.

Volviendo al patio de los Naranjos de la Catedral, donde dejamos al pintor intentando plasmar una realidad de la realidad,
Dimos una vuelta completa al edificio, nos tomamos unos cadelicos.......de comida rápida, ( Una y no mas, nunca mais a las comidas rápidas), bajamos a pasear al puente, rece una pequeña oración al ángel allí residente, siempre rezo a lis Angeles, quizá por sentirlos inalcanzables y.... como decirlo, no normales.
De vuelta al coche, al pasar por una de las puertas del patio de la Catedral, vimos a lo lejos que el pintor seguía en su tarea, y de lejos ya se vislumbraba su obra, nos acercamos sin planearlo detrás de el, y con la mala costumbre que me acompaña de hablar primero y pensar después, le dije al pintor... "Ya has pegado el cambiazo, este si esta muy bien", a lo que el muchacho se giro, y mientras lo veía deslumbrarse por el sol que había a mís espaldas, como reo ante el cadalso, esperé, una mala respuesta merecida, pero, al igual que su obra, meditada, firme y segura, simplemente dijo.... Eras el que estaba sentado ahí enfrente.
Empezamos a hablar un ratillo con el, y mientras le explicaba mi anterior entrada del blog y le enseñaba su foto, un niño, al ver el cuadro dijo: Mamá, mira que bonito, y sus orejas enrojecieron, en mi fuero, luchando entre coger su cuadro y salir correteando con el, pero pudo la poca decencia que me queda, y solo lo alabé, él, Javier, que así se llama el pintor, decía que tardaría algunos días en terminarla, yo, me sentí ante Sisley, dejando que mi imaginación, iluminara cada rincón del óleo, mañana buscare algo de su obra, y si me da permiso, pondré algún enlace.

--- Ya sabes algo mas, pero no lo sabes todo.