Ayer en el gimnasio, hablando con un desconocido en el baño turco, con el anonimato que da el vapor, me abria su alma, creo yo, al decirme que hacia 4 años, se habia divorciado de su esposa, dijo "esposa", con la reverencia que da, no lo querido y perdido que puedes volver a encontrar, sino con la certidumbre de lo que has visto romperse.
El hombre también lanzaba el grito mudo, que no sordo, contándome que con la pérdida de la separación, también perdió las amistades, eso me recordó vivencias propias.
Hace tiempo, tuve una pareja que pensaba que no teníamos amigos, no era del todo correcto, ( aquello fue el anuncio de una muerte ), y al encontrarme com dos casos similares, me da por pensar una teoría, bueno, son varias.
- Las personas están muy solas, queremos compañía, pero bajo nuestro dominio dictatorial, y si no nos gusta, puerta. No tenemos aguante, y una amistad es hoy por ti, mañana por mi.
- Pensamos que somos los desgraciados solitarios sin amigos, la culpa de este desgraciado sentimiento lo tiene el cine, que nos hace pensar que hay E.T's tras cada esquina.
- Pienso que la amistad, sana, desinteresada, y de por vida, es simplemente mentira, siempre hay un trasfondo de amor, interés o necesidad, y pese a lo duro de este pensamiento, tras un liberador suspiro, me siento libre, por sentirme mas afin al resto de la solitaria humanidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario